El doble difusor, el conducto F, el soplado de los escapes… Cada año las escuderías de la Fórmula 1 nos sorprenden con un nuevo avance, que normalmente roza la legalidad del reglamento, y del que se habla y especula durante meses.
La regulación en altura de los monoplazas quizás no sea tan novedosa pero parece el ‘invento’ de la pretemporada. Seguimos sin descubrir a ciencia cierta como y que ‘maquinó’ el cerebro de Newey para Red Bull pero ahora Lotus y Ferrari se han puesto las pilas.
La escudería italiana, está a la espera de que la federación internacional (FIA) de luz verde a su ‘artilugio’. Algo que ya ha hecho con el sistema desarrollado por Lotus.
Pero, ¿para qué sirve este avance?.
Muy sencillo, variar la altura del monoplaza permite mejorar su estabilidad en la frenada además de ganar carga aerodinámica en el paso por curva.
Prohibidos los sistemas accionados por el piloto, la de Ferrari es una solución mecánica que se activa automáticamente en la frenada.
En Maranello esperan impacientes la decisión de la FIA para seguir perfeccionando el sistema. Una vez recibido el ‘Ok’ será montado en el Ferrari de 2012 para evaluarlo en los primeros test de la pretemporada.
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